Existe en Japón un ritual ancestral
por medio del cual, alguien se arrebata la vida del modo más doloroso
que cabe imaginar. Esto no es así por casualidad. La vida es un bien muy
preciado y precisamente por eso el hecho de perderla por tu propia
mano, debe hacerte recordar, a cada milésima de segundo, lo mucho que se
pierde.
A este ritual se le llama Seppuko, pero se le conoce como Hara Kiri, su acepción más vulgar.
Por lo general los que recurrían al Seppuko, se buscaban un socio que acelerase el final.
Los
motivos que empujaban a alguien a recurrir al Seppuko eran diversos, el
deshonor, la orden un superior, la muerte de este o sencillamente no
envejecer.
Este ritual está ya en desuso, pero eso no impide a la gente seguir quitándose la vida.
En
España se registran más muertes por suicidio que por accidente de
tráfico. Es la primera causa de muerte "externa", o no natural, y sin
embargo, estos datos sin ser ocultados, se silencian.
Todos
los fines de semana se da la cifra de muertes por accidente, sin
embargo nunca se menciona el número de suicidios, es una incógnita.
El
suicidio se ha convertido en algo oscuro y que no afecta más que a los
familiares del difunto. Que se quedan con la angustia permanente del
¿por qué? y la sensación irreal de que podrían haber hecho algo más por
evitarlo.
Mirar
a otro lado u obviar que esto sucede, no es manera de afrontar el
problema. Tratarlo como algo natural e inevitable tampoco. Estoy muy
lejos de conocer la solución a este problema, pero soy consciente de que
negar que esto ocurre, que la gente se quita "de en medio" todos los
días, no es el mejor modo de afrontarlo.
Los medios de comunicación no tienen nada que decir al respecto
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Hasta
aquí había escrito, y no pensaba seguir más allá, solo unas lineas, pero estos días
pienso mucho en el tema y leo cosas relacionadas, así me he enterado del
temor que sienten los medios de comunicación
al llamado "efecto contagio" que puede provocar una noticia relacionada
con el suicidio, en alguien que ya es propenso a quitarse la vida.
No
sé hasta que punto me convence ese punto de vista, desde luego yo
siempre he pensado que es mejor saber, que no saber. Ni necesito, ni
quiero, que me protejan. En todo caso, hasta los últimos suicidios de
gente famosa, fueron siempre por realizar juegos eróticos arriesgados. Osea, que no se suicidaron, por lo tanto no nos informaron de ningún suicidio.
También
he pensado en la supuesta "herencia" que puede haber entre los
suicidas. Sin saber absolutamente nada de genética, he llegado a una
conclusión. Cuando un ser querido se quita la vida, tratamos de
racionalizar el hecho como medio de defensa ante el dolor, y mientras
hacemos esto, lo aceptamos y al aceptarlo se nos abre esa posibilidad en
el horizonte. Si llegamos a aceptar que alguien no deseaba seguir en el
mundo y que ha elegido el momento de "irse", aceptamos que quizá
nosotros también elijamos esa opción en el futuro, con lo que el
componente genético no existe...
En fin, ahí estoy, dándole vueltas a una cuestión irresoluble.
¿Por qué se ha suicidado?