jueves, 4 de agosto de 2011

LO QUE ME SACA DE MIS CASILLAS



Hoy toca post veraniego. Ahhh, el verano. Sin duda mi época del año favorita. Ellas menos ropa, nosotros más calientes y nuestras cervezas más frías. Pero no todo va a ser bueno en la época estival, también este paraíso térmico tiene sus contras y bien gordos.

1. LAS TERRAZAS URBANITAS

Quéeeeee rabia!!! A raíz de la ley antitabaco observamos como han proliferado como champiñones en la mierda estas aberraciones del ocio. Atrás quedaron esos lugares de esparcimiento público en plazas y parques donde camareras de la ESO calmaban nuestra sed y luchaban por conseguir una propina para comprarse algún capricho como la píldora del día después.
De un tiempo a esta parte vemos como sobretodo en nuestro municipio (propiciado por una exección de impuestos de nuestro gentil alcalde) cada puto bar tiene permiso para quitar 4 plazas de aparcamiento de nuestras calles (donde ya es difícil estacionar, y si no que le pregunten a Little cómo le va desde que abrieron los nuevos juzgados, pero bueno, eso es otro tema aparte). Y no os creáis que aprovechan una acera ancha, una calle peatonal o un trozo de descampado. Ahora cualquier hostelero de Paterna (hasta los chinos) sacan mesas y sillas a la carretera con total impunidad, donde la gente consume con una valla de de tráfico como única barrera de protección. Los hay más considerados que cuelgan de estas vallas un triángulo reflectante, sus clientes ya pueden estar más tranquilos. Y es que al final las autoridades sanitarias van a tener razón, el tabaco provoca adicción, porque sinó, que me expliquen cómo una persona en su sano juicio se puede tomar una cerveza apelotonado como cerdos en el camión del matadero, con coches pasando a escasos centímetros de su espalda, vespinos haciendo tronar sus tabis y oyendo sonidos estridentes de los jóvenes que bajan las ventanillas de sus coches para compartir su diarreica cultura musical. Añoro esas terrazas en las que las camareras se jugaban la vida en cada pedido cruzando transitadas calles hasta la barra cargadas de leches merengadas y nacionales. Echo de menos hacer la rotonda del paseo Europa y que todo el mundo levante la mirada para ver quién ha entrado en Paterna. Por favor, si tú también estás indignado, en un momento de furia estampa tu coche contra la terraza urbanita más próxima a tu casa y que hace que estés dando la tercera vuelta a la manzana para aparcar el puto coche. Cuando cunda el pánico seguro que esta moda pasajera sólo será un mal recuerdo. Gracias.

2. LOS ABUELOS TOMANDO EL FRESCO

Dios!!!! Ya está bien!!!! Después de veinte minutos para aparcar en un pueblo que está a 15 km del centro de Valencia, donde lo que se supone que lo bueno que tenemos de vivir en una ciudad dormitorio es eso, que estacionar no debería ser un problema, te encuentras con este fenómeno de los años 50. Al menos las terrazas urbanitas no te molestan cuando andas. Y es que ¿puede haber algo más desagradable y que me saque más de mis casillas que tener que cruzar de acera por que en mi camino se ha cruzado un contubernio de jubilados apotronados en sus sillas playeras al amparo de su portal? NO!!! Estos consumidores de recursos públicos, casi siempre protegidos por perrillos-rata (que ladran estridentemente a tu paso mientras cruzas a la otra acera cargado con las bolsas de la compra, con las que no puedes pasar por el hueco que te han dejado los recetas-rojas, en las que sólo quedan vestigios de esa barra de helado que se derritió mientras intentabas aparcar) te mirarán de arriba a abajo mientras vas dejando un rastro de helado dirritío a tu paso, mientras debaten de política, deportes o cualquier otro quesito del trivial. Tanto dar por el culo para que pongan un banco en el parque y luego ocupan la vía pública. A estos sí que tenían que desalojarlos los mossos con toda su furia. Por cierto, si después de arramblar una terraza urbanita véis que no os cabe el coche, podéis aparcar encima de la acera para que uno de éstos añorables personajes os cambie el aceite del coche.

3. LOS PADRES QUE HACEN MEAR A SUS HIJOS EN LA CALLE

Por el amor de dios!!!! Esto ya es lo que faltaba. Si cuando ya por fin estás llegando a casa te encuentras con ésto, la enajenación mental está más que justificada. ¿Estamos locos? ¿es que acaso somos animales???? ¿es que esto es Portugal??? Por favor!!!!!! Entra en el baño de un puto bar, haz que tu hijo se mee en los pantalones, ponle papeles de periódico, pero joder.... no le bajes los pantalones/subas la falda entre dos coches, no lo lleves a un árbol con un tronco de 20 cm de diámetro de una avenida como si eso ya os hiciera invisibles y por su puesto... no hagas como que es normal, porque amigo... NO LO ES JODER!!!!

martes, 2 de agosto de 2011

LAS BICICLETAS SON PARA EL VERANO

...parafraseando al gran Fernando Fernán Gómez en el título del post.





Dedicado a todos los que trabajamos en Agosto.